La criminal entrada de Brian Aguirre que pudo lesionar de gravedad a Leandro González y que el VAR no apreció como roja directa.

 

Si en la Liga Santander el VAR no deja de levantar polémicas en cada fin de semana de competición, en la Primera División Argentina no se queda corto. De la misma forma que el clásico entre Independiente y Racing había despertado bastante controversia en torno a sus decisiones, la patada que Brian Aguirre le pegó a Leandro González en Rosario terminó de demostrar que el criterio que siguen los árbitros desde la sala VAR para tomar un veredicto es de todo menos serio y unificado.

Como se puede apreciar en las imágenes, el jugador de Newell’s Old Boys levanta la pierna en exceso impactando con los tacos en la cara interna de la rodilla de Leandro González provocando una torsión en la pierna izquierda del jugador de River Plate. Catalogar la acción de juego brusco grave es quedarse muy corto, ya que dicha entrada pudo haber lesionado de gravedad a Leandro González, pero cuando parecía que el VAR entraría de oficio para revisar la infracción y avisar al colegiado del partido, Hernán Mastrángelo, el vídeo-arbitraje decidió tomarse un café mientras tanto. Dio luz verde al juego posteriormente y el encuentro se reanudó.

 

 

Empieza a resultar verdaderamente sorprendente el número de acciones en las que el VAR decide no intervenir siendo errores claros y manifiestos, tanto en ligas europeas como internacionales. Cuando parecía que el vídeo-arbitraje traería consigo el fin de la polémica, no solo no ha conseguido erradicarla, sino que sigue echando más leña al fuego.