Ortiz Arias – 8,0
GRAN NIVEL: Partido redondo de Miguel Ángel Ortiz Arias al frente del encuentro disputado en el estadio de El Sadar entre Osasuna y Valencia. El colegiado madrileño cuajó un arbitraje de notable en un choque en el que se produjeron acciones relevantes durante casi los noventa minutos. Durante la primera mitad mantuvo el control del choque dejando jugar bastante a ambos equipos pero castigando con amarilla las jugadas en las que algún jugador se pasó de frenada. En la segunda tuvo más trabajo. Señaló el punto de penalti en dos ocasiones acertando en ambas, y expulsando con roja directa a Unai García de forma acertada tras derribar a Samuel Lino dentro del área sin intención de disputar el balón. Cerró el partido expulsando a Rubén Peña por una patada sin el balón en juego en la espalda de Hugo Duro de forma correcta y se lleva un notable alto.
González Fuertes – 5,5
SIN PROBLEMAS: Aprobado sin mayores problemas para González Fuertes en un partido en el que apenas tuvo que hacer acto de presencia. El colegiado asturiano pasó de puntillas por un choque en el que enseñó las cartulinas amarillas oportunas y no tuvo opción de complicarse la vida al no producirse acciones de relevancia. A falta de unos minutos para el final del encuentro, expulsó con segunda amarilla a Embarba por una acción muy fea a una altura desmedida. De hecho, la infracción debería haber sido castigada con roja directa y no con segunda amarilla. Fuera de ello, su partido fue bastante correcto y dicho error no cambió nada en el desarrollo de los últimos instantes.
Martínez Munuera – 4,5
INSUFICIENTE: Primer suspenso de la temporada para Martínez Munuera tras un inicio de Liga Santander de gran nivel. Tras cuatro aprobados consecutivos, su arbitraje en el estadio Civitas Metropolitano le condenó al 4,5. Su partido no fue malo en líneas generales, mostró las cartulinas amarillas oportunas e intentó apostar por dejar jugar en todo momento, sin embargo, cometió un error de gravedad. A falta de unos segundos para el final de la primera mitad, perdonó la roja directa a Giménez por una entrada muy fea sobre Arnau. El jugador del Girona se tuvo que marchar lesionado y el central uruguayo siguió sobre el terreno de juego. Una acción que oscurece otra actuación que pintaba a aprobado.
Gil Manzano – 3,5
SOBREPASADO: Partido con más sombras que luces de Gil Manzano en el estadio Sánchez Pizjuán al frente del Sevilla – Athletic Club. Pese a no tener nada que ver en la acción más polémica del encuentro en la que el VAR asume toda la responsabilidad de la misma, no tuvo su mejor actuación en lo que a jugadas simples se refiere. Tuvo momentos de muchas faltitas, y momentos de dejar seguir el juego en exceso. Cometió errores de criterio a la hora de mostrar las tarjetas amarillas y terminó viéndose sobrepasado por el propio partido teniendo que ir al VAR a revisar una acción muy clara de roja directa para Ander Herrera al evitar un gol con una falta en la frontal del área.
Mateu Lahoz – 6,0
EN SU LÍNEA: Buen partido de Mateu Lahoz a los mandos del encuentro disputado en el estadio Coliseum Alfonso Pérez entre Getafe y Real Madrid. El colegiado valenciano no estuvo tan fino como en otras ocasiones pero llevó el partido con el control perfecto que siempre le caracteriza. Quizá erro en un par de acciones leves pero estuvo acertado a la hora de encarar las jugadas de más relevancia. Anuló un penalti que había señalado en primer momento a favor del Real Madrid a instancias del VAR ya que en la acción previa el balón había salido por línea de banda y añadió el tiempo de descuento oportuno en ambas mitades. Sigue sin suspender Mateu Lahoz en las ocho primeras jornadas de Liga Santander.
Del Cerro Grande – 4,5
IRREGULAR: Carlos Del Cerro Grande tuvo uno de esos partidos en los que un sólo error le condena al suspenso. El colegiado madrileño realizó un encuentro medianamente correcto en líneas generales, pero en la acción clave del choque, erró estrepitosamente. Mediada la primera mitad, Óscar Plano era derribado por Pezzella cuando se disponía a encarar a Rui Silva, sin embargo, Del Cerro Grande señaló una supuesta mano del delantero del Real Valladolid en el control. Tras revisar el monitor y comprobar que el toque había sido en el hombro, enseñó la cartulina roja al defensa del Real Betis. El resto del partido fue bastante tranquilo y apenas se perdió tiempo, pero dicho error le condena.
Hernández Hernández – 4,5
DELICADITO: Hernández Hernández está cogiendo la mala costumbre de sacar amarillas por cualquier cosa. En un partido que tampoco fue excesivamente intenso entre Cádiz y Espanyol, el colegiado canario mostró hasta 8 cartulinas amarillas, varias de ellas por acciones en las que el contacto fue mínimo. Por lo demás controló bastante el juego y no dejó pasar ni un solo amago de protesta. Estuvo atento a la hora de detener el partido por un problema de salud en la grada pero cerró el choque tragándose un penalti de Brian Olivan sobre Rubén Sobrino.
Soto Grado – 6,0
MÁS LUCES QUE SOMBRAS: Partido bastante correcto de Soto Grado a los mandos del encuentro disputado en el estadio Reale Arena entre Real Sociedad y Villarreal. Tras unas últimas actuaciones bastante justas de nivel, hoy cuajó un buen arbitraje apostando por dejar seguir el juego. Si bien es cierto que quizá se excedió en la altura del listón a la que puso las infracciones, estuvo muy acertado mostrando una tarjeta amarilla a Lo Celso por un piscinazo grosero dentro del área. Añadió el tiempo justo en ambas mitades y solventó bien los últimos minutos.
Munuera Montero – 4,5
CRECIDO: Pese a ser un adjetivo que de primeras pueda ser positivo, en el caso de Munuera Montero no es así. El colegiado andaluz pareció levantarse con el pie izquierdo ya que no tuvo la mejor actitud posible con los jugadores, respondiendo de forma excesivamente agresiva para ser una persona que debe controlar el partido. Pese a no hacer un mal arbitraje en líneas generales, falló en una acción clave en la que Raphinha caía derribado dentro del área y Munuera Montero le gesticulaba en repetidas ocasiones que se había tirado. Sí es cierto que el jugador brasileño puede llegar a exagerar la caída, pero el derribo existe. Debe mejorar mucho su actitud si quiere que los jugadores sean justos con él.
Pizarro Gómez – 0,5
PEOR IMPOSIBLE: Es verdaderamente complicado realizar un arbitraje peor que el que hizo Pizarro Gómez en el estadio Martínez Valero en el encuentro que cerraba la jornada 8 entre Elche y Real Mallorca. Cuando pensábamos que sería imposible empeorar el arbitraje de González Fuertes en el Valencia – Celta de Vigo, el colegiado madrileño ha conseguido empeorarlo. Haciendo un resumen rápido del partido para no aburrir a los lectores, Pizarro Gómez se tragó un penalti y cuatro expulsiones. Lo único que le salva del 0 es señalar correctamente un penalti de Edgar Badía sobre Raíllo en la segunda mitad. Por lo demás, tuvo que ser ayudado por el VAR para señalar un penalti de Bigas a Antonio Sánchez en la primera mitad, y expulsar a Lucas Boyé y Muriqi en la segunda. También debió mostrar la roja directa a Grenier y Ángel, pero en esta ocasión el VAR se fue a tomar un café. Surrealista partido entre Elche y Real Mallorca, y surrealista arbitraje de Pizarro Gómez.
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