Iglesias Villanueva – 3,5

 

CONDENADO: Lo de Iglesias Villanueva y el VAR en el estadio Martínez Valero fue un auténtico show. Tanto Jaime Latre, desde el vídeo-arbitraje, como el colegiado gallego, desde el césped, formaron una combinación completamente explosiva a los mandos del encuentro que abría la jornada 23 en la Liga Santander entre Elche y Real Betis. Mientras que Iglesias Villanueva decidió tomar una postura conservadora desde el terreno de juego, el VAR tomó la decisión de entrar en absolutamente todas las acciones grises que se produjeron durante el choque.

Sí bien es cierto que acertó en los tres penaltis que señaló a favor del Real Betis, se cargó el partido por completo expulsando a Lisandro Magallán por una mano que, al no cortar una ocasión manifiesta de gol, jamás puede ser roja directa. Lo más grave de la acción es, primero, entrar a revisarla desde el VAR, cuando en absoluto se trata de un error claro y manifiesto, y segundo, mostrar la roja tras ver en el monitor que no existe error en su primera decisión. Tras la injusta expulsión, señaló tres penaltis, todos correctos, a favor del Real Betis. Cerró el partido añadiendo un tiempo de descuento muy corto teniendo en cuenta las grandes pérdidas de tiempo que se produjeron en la segunda mitad.

 

Alberola Rojas – 7,0

 

SERIO: Arbitraje de gran nivel de Alberola Rojas al frente del encuentro disputado en el RCDE Stadium entre Espanyol y Real Mallorca. El colegiado castellano-manchego realizó una de esas actuaciones con sello de categoría. No quiso entrar en contactos leves, intentando dejar jugar lo máximo posible, también dentro de las áreas. Dejó seguir el juego en una acción entre Darder y Kang In Lee que dio pie al segundo tanto del Espanyol, acción en la que el robo es limpio y no existe infracción. Tiene mérito ya que más de un colegiado habría castigado la acción con falta para evitar problemas.

De la misma forma, en la segunda mitad, señaló saque de puerta en una caída dentro del área de Amath en la que, previamente, César Montes toca balón de forma limpia para, tras ello, derribar al delantero del Real Mallorca. Segundo gran acierto del colegiado una jugada complicada. Cerró el partido añadiendo seis minutos de descuento debido a las retiradas pérdidas de tiempo en la segunda mitad y se lleva un notable muy trabajado.

 

Muñiz Ruiz – 6,5

 

CORRECTO: Partido de muchas dificultades para Muñiz Ruiz impartiendo justicia en el encuentro disputado en el Nuevo Mirandilla entre Cádiz y Rayo Vallecano. El colegiado gallego tuvo trabajo y del bueno durante los noventa minutos. El encuentro fue especialmente emborronado, con contactos constantes y fingimientos por parte de jugadores de ambos equipos, lo cual dificultó y mucho la labor de Muñiz Ruiz. Si bien es cierto que cometió algún que otro error de baja importancia, estuvo bastante acertado en las decisiones importantes, expulsando por doble amarilla de forma justa a Catena y alargando el partido hasta el minuto 103 por las reiteradas pérdidas de tiempo. No fue un arbitraje brillante, pero es un aprobado de muchísimo mérito.

 

Gil Manzano – 5,0

 

LUCES Y SOMBRAS: Gil Manzano fue el encargado de impartir justicia en el derbi madrileño entre Real Madrid y Atlético de Madrid disputado en el estadio Santiago Bernabéu. El colegiado extremeño, que llegaba al encuentro rodeado de polémica por su designación, tuvo luces y sombras a lo largo de todo el choque. La intensidad del partido fue de menos a más, lo que fue generando una mayor trabajo para Gil Manzano, solventándolo medianamente bien. Regaló alguna que otra amarilla que pudo haberse ahorrado para terminar expulsando a Correa con roja directa por un codazo sin estar el balón en juego. Si bien es cierto que la acción puede dejar dudas, Correa compra todas las papeletas para ser expulsado soltando el codo hacia atrás. No cometió errores de bulto y pudo ser más serio en su criterio, pero aprueba sin muchos problemas.

 

Hernández Hernández – 4,0

 

ENGAÑADO: Pese a que el partido de Hernández Hernández, en líneas generales, fue bastante correcto, un error de peso en la segunda mitad le termina por suspender. El colegiado canario fue designado para impartir justicia en el encuentro disputado en el estadio de Mestalla entre Valencia y Real Sociedad, y lo hizo a medias tintas. Tras una buena primera mitad en la que enseñó las cartulinas oportunas, en la segunda fue engañado por Hugo Duro teniendo que ir al monitor de VAR para revisar un penalti que señaló en primera instancia a favor del Valencia. El contacto existe, pero es mínimo, y tras él, el delantero local se deja caer. Valiente decisión de González González desde el VAR entrando a valorar una acción que terminó por suspender a Hernández Hernández.

 

Díaz de Mera Escuderos – 3,0

 

SIN NIVEL: La temporada de Díaz de Mera Escuderos está empezando a ser peligrosamente negativa. El colegiado castellano-manchego volvió a cuajar una actuación sin mucho nivel a los mandos del encuentro disputado en el estadio de San Mamés entre Athletic Club y Girona. Tras una primera mitad en la que se llevó la mano al bolsillo de las tarjetas en más ocasiones de las necesarias, en la segunda dio el do de pecho. Se comió un penalti de Yeray sobre Riquelme que, pese a ser posterior al remate del jugador del Girona, no deja de ser penalti. El central del Athletic Club golpea con fuerza la rodilla apoyada de su nival pudiendo lesionar de gravedad al centrocampista del Girona. Iglesias Villanueva, en el VAR, tampoco quiso dar señales de vida.

 

De Burgos Bengoetxea – 2,5

 

ILÓGICO: De Burgos Bengoetxea, tras unas últimas jornadas a un nivel bastante notable, volvió a realizar un arbitraje para olvidar a los mandos del Celta de Vigo – Real Valladolid disputado en el estadio de Balaídos. El colegiado vasco, que volvió a abusar en exceso de las tarjetas amarillas, dejó sin castigo una entrada muy fea a la altura de la rodilla de Javi Sánchez sobre Fran Beltrán en la primera mitad que debió ser roja directa, para, posteriormente en la segunda mitad, expulsar a Amallah tras una entrada que en absoluto da para roja directa. Si la primera acción no la castiga ni con amarilla, la segunda no puede ser roja. Un arbitraje ilógico que suspende a De Burgos Bengoetxea.

 

Ortiz Arias – 6,0

 

AUTORITARIO: Ortiz Arias es uno de esos árbitros que no dejan pasar ni una. Te puede gustar más o menos su actitud autoritaria, pero sigue el reglamento a rajatabla y no perdona los errores. A los mandos del encuentro disputado en el estadio de los Juegos del Mediterráneo entre Almería y Barcelona, el colegiado madrileño se mostró serio y decidido durante los noventa minutos, castigando con amarilla infracciones en las que normalmente se haría la vista gorda como poner el balón en juego antes del pitido del árbitro.

Sacó un par de amarillas por protestar, lo cual está dentro de su media habitual, junto con otras tantas por acciones del juego. Si bien es cierto que quizá fue excesivamente autoritario, controló el partido a la perfección, lo cual resulta un punto muy positivo. Pudo tener más nota de la que finalmente acumula, pero su actitud en algunos diálogos con los jugadores le resta unas décimas.

 

Pulido Santana – 5,0

 

IRREGULAR: Partido un tanto irregular de Pulido Santana al frente del último encuentro de la jornada del domingo disputado en el estadio Sánchez Pizjuán entre Sevilla y Osasuna. El colegiado canario no tuvo un partido fácil, y es que las acciones polémicas estuvieron latentes durante los noventa minutos, sin embargo, supo llevarlas con mayor o menor control. En lo importante acertó, pero tuvo errores en pequeños detalles como son las tarjetas amarillas, regalando un par de ellas cuando pudo habérselas ahorrado. También se comió un saque de esquina en los últimos minutos a favor del Sevilla que fue muy protestada por los jugadores y supuso la expulsión por roja directa de Fernando. Estuvo al borde del suspenso pero en lo importante sí estuvo acertado.

 

Figueroa Vázquez – 5,5

 

DELICADITO: El Villarreal – Getafe disputado en el estadio de la Cerámica fue uno de esos choques que desean la gran mayoría de colegiados. Un encuentro tranquilo, sin apenas intensidad, en el que el árbitro es un mero espectador. Sin embargo, Figueroa Vázquez pareció aburrirse, ya que estuvo intentando meterse de por medio señalando contactos absurdos que ralentizaban un choque con mucho ritmo. Si bien es cierto que no cometió errores de bulto ya que tampoco se dieron acciones de excesiva polémica, no estuvo fino en las acciones más simples. Aprueba pero sin mucha solvencia.